El corcho sube de precio
Contrastes en la extracción del corcho catalán: sequía y alza de precios
En Cataluña, la reciente campaña de extracción de corcho ha estado marcada por claros contrastes. La sequía y un incremento del 30% en el precio del corcho han creado un escenario desafiante para los productores y trabajadores del sector.
Sequía y efectos sobre los alcornocales
Las lluvias han sido escasas en Cataluña durante los dos últimos años, llevando a condiciones de sequía. Esta situación ha tenido efectos negativos sobre los alcornocales. Muchos alcornoques presentan signos evidentes de debilitamiento, mostrando ausencia de hojas, o con hojas nuevas de tamaño reducido y copas menos densas. A esto se suma que la temporada de extracción se vio acortada: comenzó tarde debido a la falta de lluvias que retrasó el cambio de hoja y la floración, y terminó antes de lo esperado debido a la sequía y altas temperaturas.
Una producción reducida y el alza de precios
De todo el corcho extraído durante esta temporada, entre el 55 y el 65% ha sido catalogado como desecho. Del total, entre el 2 y el 3% corresponde a corcho quemado, entre el 5 y el 10% es corcho de primera extracción, y el 25% restante se considera corcho taponable o apto para hacer discos. Dadas estas condiciones y la calidad del corcho extraído, el precio ha subido en un 30%.
Se estima que la producción total de corcho de este año rondará las 1.800 toneladas, una cifra significativamente menor en comparación con las 4.500 toneladas extraídas en 2018. Estos datos distan mucho de la producción potencial estimada en unas once mil toneladas anuales. Es evidente el desajuste entre la oferta y la demanda, especialmente si consideramos que alrededor del 60% de los alcornocales en Cataluña aún están sin explotar.
Hacia una gestión sostenible y la necesidad de trabajadores
Reconociendo la importancia socioambiental de una gestión sostenible del alcornocal, se destaca la urgencia de intervenciones conjuntas entre el sector público y privado. Estas acciones buscarían equilibrar la oferta y la demanda que, desde hace tiempo, presentan desajustes.
Por otro lado, si bien no ha habido propiedades que no se hayan descorchado por falta de trabajadores, se detecta una carencia de sacadores de corcho. Esta necesidad se acentúa si pensamos en la importancia de regenerar y mejorar los alcornocales. Muchas áreas forestales carecen de gestión y en otras es esencial impulsar la regeneración para mantener la producción.