
La gestión del agua, un desafío clave para el sector vitivinícola
Expertos debaten sobre estrategias para enfrentar la sequía en la Barcelona Wine Week.
La crisis hídrica se ha convertido en una preocupación central para el sector vitivinícola en España. Durante la mesa redonda Aprovechamiento del agua: el sector del vino ante la amenaza de la sequía, celebrada en la Barcelona Wine Week, especialistas analizaron las medidas necesarias para optimizar el uso de este recurso esencial.
El encuentro, organizado por Perelada, contó con la participación de Delfí Sanahuja (Bodega Perelada), Diego Pinilla (Raventós Codorníu), Ángel Anocíbar (Abadía Retuerta), Carlos Moro (Bodegas Familiares Matarromera) y Enric Bartra (Instituto Catalán del Vino – INCAVI). Moderado por la periodista Amaya Cervera, el debate abordó los efectos del cambio climático en la viticultura y la urgencia de implementar soluciones efectivas ante la escasez de agua.
Los expertos coincidieron en la necesidad de una planificación de riego adaptada a las particularidades de cada viñedo. Sanahuja destacó la importancia del apoyo de irrigación en años secos, mientras que Pinilla subrayó la urgencia de planes de adaptación para mitigar el impacto de la sequía. Bartra alertó sobre la aceleración de la escasez hídrica en los últimos años, lo que obliga a analizar cada parcela y aplicar estrategias específicas.
El impacto del cambio climático es evidente. Anocíbar reveló que en Abadía Retuerta la temperatura ha aumentado 1,8°C desde 1968, adelantando la vendimia de octubre a agosto. Moro, por su parte, defendió la necesidad de un suministro adecuado de agua para garantizar la calidad del vino, rechazando estrategias que limiten el riego en exceso.
Entre las soluciones propuestas, Bartra destacó la reutilización del agua, citando el caso de Finca Garbet (D.O. Empordà), donde Bodega Perelada emplea agua regenerada desde 1997. Además, se plantearon alternativas como el riego subterráneo, la captación de agua de lluvia y la planificación de riegos con previsión satelital. Pinilla abogó por la viticultura de precisión y la recopilación de datos para optimizar el consumo de agua, mientras que Moro impulsó un enfoque integral basado en la acumulación de agua en balsas, cubiertas vegetales y depuración de aguas.
Uno de los puntos clave del debate fue la necesidad de mayor coordinación con las administraciones públicas. Pinilla insistió en la importancia de una estrategia sectorial conjunta que fomente la formación y la divulgación.
Como conclusión, Sanahuja resumió la clave para el futuro de la gestión del agua en la viticultura en tres conceptos: información, formación e innovación. Según el experto, solo a través de estos pilares será posible desarrollar soluciones a largo plazo que permitan afrontar los períodos de sequía extrema y garantizar la sostenibilidad del sector.
FUENTE: VINETUR.COM